Israel ha aceptado la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. Es lo único que los ministros de exteriores de la Unión Europea han conseguido sacar a su homóloga israelí, Tzipi Livni, tras la reunión de los 27 en Bruselas. Se abrirán tantos corredores humanitarios como sea necesario, pero no habrá apertura de pasos fronterizos o un alto el fuego bilateral y permanente. Ante la presión de los observadores internacionales, Israel investigará el posible uso inadecuado de bombas de fósforo blanco contra la población civil.