Un sencillo test permite descubrir si un niño o un asolescente tiene riesgo de padecer anorexia. Una enfermedad que puede aparecer con apenas 8 años. Consiste en elegir con qué silueta, de más delgada a más obesa, se identifica más.La persona que se somete al test sólo tiene que elegir la silueta que considera más parecida a su cuerpo. Esta sencilla prueba puede detectar el riesgo de desarrollar anorexia y bulimia en los adolescentes.Es como mirarse en un espejo en el que el especialista ve el mismo reflejo que el paciente y el resultado es que las chicas en general se apuntan más kilos de los que tienen.El grado de insatisfacción con la imagen corporal se puede detectar a edades muy tempranas. Un estudio ha demostrado que la mitad de los niños de entre 8 y 12 años tienen miedo a engordar y muchos de los menores que están a dieta ni siquiera tiene sobrepeso.
