La emoción impide responder al francés Jean-Michel André cuando le preguntan cómo ha sido reencontrarse con su hija después de 25 días. El tiempo que ha pasado desde que lanzó un mensaje de auxilio mientras mostraba dos fotos de Elise. Entonces, dos desconocidos le dieron una paliza para arrebatarle a la pequeña. Al volante del coche en el que huyeron, Jean-Michel reconoció a su mujer, la rusa Irina Belénkaya. La disputa del matrimonio por la custodia de su hija comenzó hace dos años. Primero ella se la llevó de París a Moscú. Después él la raptó en la capital rusa y se trasladaron de nuevo a Francia. El último de estos secuestros ha concluido en un puesto fronterizo de Hungría. La policía detenía a la mujer y le entregaba a Elise a su padre.