Sumergido casi por completo. Así quedó el coche tras caer por un puente sobre el río Eo, en Lugo. La conductora pasó casi ocho horas con el agua al cuello antes de ser rescatada. Junto a ellos viajaban su madre y su hijo, de dos años, que fallecieron en el accidente. El sinistro se produjo a escasos 500 metros del domicilio de las víctimas. Tomaron un camino del que hacen uso los vecinos para cruzar el río, pero que es muy estrecho, tanto que el coche se precipitó. Mañana se celebrará el funeral por la madre y el niño fallecidos.