Los jugadores del Alcorcón celebraron por todo lo alto en el césped del estadio Santo Domingo, de la localidad madrileña, la histórica victoria por 4-0 ante el Real Madrid en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.Junto a los futbolistas estuvieron los aficionados, que invadieron el campo en cuanto el árbitro hizo sonar el silbato al final del partido.