La previsión de vientos fuertes en toda la costa Cantábrica y en Galicia mantiene a muchos pendientes del oleaje. En San Sebastián, el mar ha golpeado de madrugada con fuerza contra el paseo de la playa de Ondarreta. La Ertzaintza ha vigilado de cerca el Peine de los vientos. Como en otras ciudades, la policía ha acordonado varias zonas de playa para prevenir accidentes. En Zarauz, los comerciantes han tapiado las puertas para evitar que el mar inundara los locales, ya que muchas olas superaban los muros de contención. Se mantiene la alerta naranja por riesgo de fuertes vientos en todo el Cantábrico y en la costa Atlántica gallega.