Relató por teléfono, sin pudor, el ritual caníbal al que estaba sometiendo al cadáver de su ex mujer. Christopher Mc Cuin asesinó a golpes a su ex para luego mutilarla y trocear su cuerpo. Cuando llegaron los agentes de la policía el aprendiz de caníbal tenía dispuesto en la mesa un plato de carne de la joven, además de una oreja hirviendo a fuego lento en la cocina. Un bocado que, como al último antropófago detenido, este hombre mexicano, le saldrá caro. José Luis Calva descuartizó a tres mujeres y se suicidó una vez que entró en prisión. La cuenta del banquete del caníbal de Texas asciende a la pena de muerte. Aunque la condena sea sólo por asesinato porque el canibalismo no está recogido por ningún código penal del mundo.