400 indígenas del Amazonas han sido expulsados de la zona que ocupaban a orillas del río Amazonas. El Gobierno de Brasil ha ordenado su desalojo porque estaban asentados en una zona protegida. La policía cumplió su objetivo a pesar de la resistencia opuesta por los indígenas. Los enfrentamientos entre unos y otros han terminado con siete heridos y varios detenidos. Los indígenas del Amazonas se quejan del abandono y desprotección social que sufren por parte del gobierno brasileño, además del acoso geográfico que sufren por el avance industrial.