Pablo Barbadillo, el joven español desaparecido en la selva peruana, apareció ayer muerto. La policía encontró su pasaporte junto a un cuerpo que había sido parcialmente devorado por los animales y con picaduras de insectos. El joven, de 23 años, estaba realizando investigaciones medioambientales para su doctorado en el departamento peruano de Madre de Dios. Está previsto que hoy se realice la autopsia para determinar la causa de la muerte, aunque sus familiares ya han reconocido el cuerpo.