María tiene 71 años, está bien de salud, pero prefiere no contar directamente lo que le ha pasado. Su hija y su marido llegaron a una residencia para mayores de Pola de Siero, en Asturias. Ella iba en el coche. Su hija le dijo que se bajara, bajó también su maleta, y la pareja se dio a la fuga. Dejaron a la anciana en la puerta de la residencia y con la maleta en la mano. Las mojas que llevan la residencia le dieron una habitación, donde de momento María se va a quedar. La policía mientras ya ha contactado con su hija y está investigando si hay un delito de abandono o no. Lo peor es que el caso de María sí ha salido a la luz, pero al año son muchos los abandonos de este tipo.