En el Danube City Hotel de Viena, cerca del estadio Ernst Happel, descansa ya la selección española; esta tarde último entrenamiento, el oficial, antes del duelo frente a Italia. Como las cosas van sobre ruedas, Luis Aragonés no tiene previsto realizar ningún cambio, es decir, van a jugar los mismos once hombres que disputaron los dos primeros partidos. La única novedad es que los jugadores ya han empezado a ensayar los penalties, por si fuera necesario ante los italianos. Suelte dispar para los jugadores en estos lanzamientos. Y si se ha visto muy enchufado a Iker Casillas, sobre todo cuando lanzaba él los penalties.