No hay apuro económico que valga para los incondicionales de las rebajas. Es el primer día oficial de descuentos y se ha notado a la entrada de los centros comerciales. Pese al entusiasmo de algunos clientes, lo cierto es que los bolsillos no están para muchas alegrías. Claro que todo depende de cómo se mire porque para los bolsillos achuchados estos descuentos pueden venir muy bien. Aún así se prevé que este año nos gastemos un 15% menos en las rebajas que en 2007. De media unos 95 euros. Hay para elegir hasta un 20 por ciento más de mercancía porque se ha vendido menos por culpa del mal tiempo y del frenazo de la economía.