Los responsables de las estaciones de servicio han denunciado que son las petroleras quienes les imponen los precios a los que deben vender los carburantes. En nuestro país, sólo las gasolineras independientes pueden marcar sus precios, que en algunos casos llegan a variar hasta en 14 céntimos. El precio de los carburantes ha experimentado un ligero descenso desde que el pasado mes de julio alcanzase su máximo histórico, a 147 dólares por barril. Hoy el petróleo de referencia en Europa cuesta 55 dólares menos, aunque esta diferencia apenas se nota en las gasolineras. La Comisión Nacional de la Competencia está investigando si las petroleras Cepsa, Repsol y BP han pactado precios para evitar que bajaran los combustibles.