El Gobierno español ha puesto en marcha la maquinaria diplomática para lograr su participación en cumbre financiera internacional convocada por la Casa Blanca para mediados de noviembre en Washington, según han informado hoy fuentes gubernamentales.El Ejecutivo realiza gestiones "en todas las direcciones, con todo del mundo y a todos los niveles", incluyendo contactos con la Casa Blanca y los equipos de los candidatos presidenciales Barack Obama y John McCain, según esas fuentes. Por su parte, El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechará las próximas citas internacionales en las que participará en estos días para intentar recabar apoyos a sus aspiraciones. Así, en la cumbre UE Asia que arranca mañana en Pekín, tiene ya cerrada una entrevista bilateral con el presidente chino, Hu Jintao, y en el marco de la Cumbre Iberoamericana con los presidentes de México, Felipe Calderón y Brasil, Luiz Inácio 'Lula' da Silva, todos ellos miembros del G-20. La convocatoria anunciada ayer por la Casa Blanca que queda limitada a los países del G-20, las economías más ricas más las economías emergentes (Estados Unidos, Francia, el Reino Unido, Alemania, Italia, Canadá, Japón, Rusia, Argentina, Australia, Brasil, Corea del Sur, China, la India, Indonesia, México, Arabia Saudí, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea), del que España no forma parte. Pero nuestro país alega que cuando cambian las circunstancias políticas y económicas, hay que mostrar "flexibilidad". Además, la decisión de España de querer estar presente en esa reunión responde, según el Gobierno, a razones objetivas basadas, en primer lugar, en su peso económico en el mundo (es la octava potencial mundial por PIB), y en segundo lugar, debido a que su sistema financiero ha sido el que ha demostrado una "mayor fortaleza" ante la actual crisis. El PP ya ha ofrecido su apoyo al Ejecutivo para utilizar algunos de sus contactos a favor de la presencia de España en la cumbre, aunque el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, ha recordado hoy que el Gobierno "está recogiendo lo que en antaño se sembró".