Mojar pan en un huevo frito se ha convertido en una auténtica delicatessen. No por lo rico que está, que también, sino por el precio que pagamos por ello. Según EstadÃstica los huevos han subido un nueve por ciento en los últimos doce meses, el pan más de un 13. Si optamos por la carne, la de pollo es la que más se ha encarecido, más de un 14 por ciento. Pero la palma se la lleva la leche. A más de un euro se paga el tetrabrick de varias marcas. Los carburantes, con una subida superior al 8 por ciento, han contribuido a llevar a la inflación hasta el 3,6 por ciento en octubre. Y seguirá subiendo, al menos hasta final de año, según el Gobierno. Asà que habrá que esperar a 2008 para que nuestros bolsillos se relajen.