El embajador de Rusia en Siria, Alexander Kinshchak, finalizó su misión diplomática de cuatro años en el país árabe. Además de respaldo militar, Moscú ha impulsado las conversaciones de paz en el formato de Astaná, empeño que gobierno y pueblo sirios agradecen pues ayudó a detener los combates en varias zonas del país, también coordinó el retorno de un millón y medio de desplazados y refugiados sirios a sus hogares en zonas liberadas del terrorismo. teleSUR