En Honduras, en un periodo de cinco años, han emigrado cerca de 60 mil menores de edad no acompañados. Según organizaciones, desde el gobierno no han existido políticas de atención para este grupo vulnerable. Aseguran que la migración es una decisión extrema que se toma cuando la vida está amenazada en su país origen. Así, a la pobreza y la violencia como principales razones que orillan a los hondureños a migrar, se suma la criminalización de los jóvenes por parte del gobierno. teleSUR