Asunción, 30 oct (EFE), (Imágenes: Alejandro R. Otero).- Ascienden a 3.150 el número de familias que habitan los "bañados" (zonas marginales) del área metropolitana de Asunción que han abandonado sus viviendas por las inundaciones provocadas por la crecida del río Paraguay, que supera ya los 5,6 metros y podría llegar hasta los 7 metros en diciembre.
En apenas cinco días, el número de desplazados de las riberas del río Paraguay por las inundaciones casi se ha triplicado hasta alcanzar las 3.150 familias, según informó hoy a Efe el jefe de emergencias de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Daniel Ribero, después de que el río alcanzase los 5,62 metros.
Los desplazamientos siguen a diario, como se comprobó hoy en el "Bañado Sur", situado junto al vertedero de basuras de la ciudad de Lambaré (Gran Asunción), donde gran número de sus habitantes comenzaron trasladarse a zonas más altas debido a que algunas zonas del barrio se encuentran anegadas y otras corren peligro de inundarse en los próximos días.
Una gran parte de los desplazados están reubicados en cuatro "refugios principales" situados en solares habilitados por la SEN, según explicó Ribero, aunque la falta de espacio hace que un grupo numerosos de familias se instalen en avenidas y calles aledañas, donde construyen sus precarias viviendas con materiales aportados por las autoridades.
La SEN, que, junto con la municipalidad de Asunción organiza las evacuaciones, también aporta a los damnificados "alimentación durante el periodo que permanecen fuera de sus casa", dijo Ribero.
Asimismo, el Ministerio de Salud inició hace dos semanas una campaña de atención a los damnificados que, hasta la fecha ha atendido a más de 640 personas, con objeto de vigilar las posibles enfermedades derivadas del alto nivel de contaminación que contienen las aguas y que provocan diarreas e infecciones respiratorias.
Además, la cartera sanitaria alerta de que las aguas estancadas conforman un foco de atracción de insectos portadores de dengue, chikungunya y zika.
La semana pasada, las autoridades municipales declararon a la capital zona de emergencia debido a que las aguas del río Paraguay alcanzaron, a su paso por Asunción, el nivel crítico de crecida de 5,5 metros y el número de familias afectadas superó el millar.
La medida, que estará vigente los próximos tres meses, aunque no contempla un aumento de los fondos para la división municipal de gestión de desastres, permitirá agilizar los trámites burocráticos en lo referente a las contrataciones de los servicios necesarios para paliar los efectos de la crecida.
No obstante, desde el ayuntamiento señalaron que si la situación se "desborda", no descartan recurrir a un "préstamo" para cubrir los gastos que se deriven, tanto de la atención a los damnificados, como los arreglos necesarios en términos viales y ambientales.
En el peor de los escenarios las autoridades paraguayas prevén que la crecida del río alcance los 7,5 metros hasta diciembre, si persist