Con la presencia de miles de personas, la Policía Federal realizó una posada decembrina para unir lazos entre las familias de los elementos que integran la corporación, algunos de ellos desplegados en diversas entidades del país.
El Centro de Mando que se ubica en la delegación Iztapalapa del Distrito Federal se transformó por unas horas. No hubo presentación de supuestos delincuentes ni se dieron informes en materia de seguridad pública.