Si clavas tu mirada en los ojos de un perro desconocido, este puede interpretar que le estás retando. Por esta razón, lo mejor es que no lo hagas.
Si es el perro que no conoces el que te mira fijamente, presta atención a estas señales, pues indican agresión:
- Tiene las orejas hacia delante y cerca de la cabeza.
- Mueve la cola rápidamente y con movimientos cortos.
- Enseña los dientes.
- Gruñe.
- Tiene el pelo erizado.