El 15 de junio de 2012, cerca de 300 policías desalojaron violentamente a campesinos de las tierras conocidas como Marina Kue, lo que desató una masacre que dejó 17 personas muertas. Pese a ser víctimas del atropello policial, la justicia condenó a 11 campesinos por el hecho y tras un largo proceso judicial, este miércoles salieron en libertad. Los agricultores liberados aseguraron que quienes los condenaron y acusaron sin pruebas deben ir presos. teleSUR