El primer ministro japonés, Shinzo Abe, visitará este miércoles la zona occidental de Japón afectada por las lluvias torrenciales que han dejado al menos 162 muertos y que se han convertido en las peores registradas en el país desde 1983, cuando perdieron la vida 117 personas. Las lluvias torrenciales provocaron la semana pasada inundaciones y deslizamientos de tierra en el oeste de Japón, destruyendo vecindarios construidos hace décadas cerca de laderas empinadas.