El Partido Popular de la Comunidad Valenciana se financió de manera "absolutamente irregular, tanto que fue delictiva". Así lo recoge la sentencia de la Audiencia Nacional, que ha condenado a cuatro años de prisión al exsecretario general del PP de la Comunidad Valenciana, Ricardo Costa y ha absuelto al exvicepresidente Vicente Rambla por la financiación irregular del partido liderado por Francisco Camps en las elecciones de 2007 y 2008.