Desde 2010, más de 120 defensores de Derechos Humanos fueron asesinados en Honduras y la mayoría de estos crímenes continúan impunes. Los defensores de Derechos Humanos aseguran ser agredidos por militares y policías en gran parte de los casos, por ello aseguran no creer en las intenciones del gobierno de crear mecanismos de protección. teleSUR