Personas sin escrúpulos introducen animales vivos como tortugas, salamandras y peces en llaveros. Los animales se hallan en una solución líquida y un poco de oxígeno, que según los comerciantes, permiten a los animales vivir unos 3 meses pero que algunos activistas señalan que tan sólo son unas pocas semanas. Los llaveros cuestan cerca a 1,50 dólares americanos y son vendidos cientos de éstos como souvenir en puertas de metros, paradas de buses y centros con mucha afluencia de gente en China.