Almería se ha volcado una vez más con la familia de Gabriel después de que miles de personas que visitan la capilla ardiente del menor, instalada en el Patio de Luces del Palacio Provincial de la Diputación de Almería. Carteles de apoyo, 'pescaítos', gritos de ánimo y aplausos, todos se han fundido en uno para dar el último adiós al niño.