Mozambique con más de 2.500 km de litoral, playas paradisíacas con aguas color turquesa, corales hipnóticos y dunas llenas de vegetación, es el lugar preferido por los sudafricanos por su oferta de ocio y fiesta, especialmente en la temporada de verano que comienza con las festividades de Navidad y Año Nuevo hasta inicios de febrero.
El país vecino posee un ambiente mucho más relajado que la propia Sudáfrica. Por eso, muchos de sus ciudadanos ponen rumbo a tierras mozambiqueñas atravesando en su mayoría la frontera por tierra, ya que gran parte de ellos transportan hasta Mozambique casi todo lo necesario, comida, bebida y a veces hasta sus propias cocinas. Ésta, precisamente, es una de las principales quejas de los empresarios del turismo mozambiqueño, ya que se trata de un turista de bajo consumo, aseguran. Explotan los recursos que ofrece el país, pero no generan apenas renta. Existe inclusive, según los propios empresarios, hoteles regentados por sudafricanos que cobran a sus clientes en moneda sudafricana y el ingreso es efectuado directamente en bancos ubicados en Sudáfrica.
Las regiones costeras de Tofo y Vilanculos, al sur del país, son las más buscadas por los turistas sudafricanos, ya que son las más próxima y de más fácil acceso. Los deportes acuáticos son otro de los motivos por los cuales hordas de sudafricanos llegan hasta la costa en los meses de verano. La alta visibilidad de sus aguas y el atractivo de poder bucear con tiburones es uno de los motivos que hacen de estas costas las preferidas para los amantes del buceo.
Llegada la noche, lodges, discotecas y bares se llenan de sudafricanos ávidos de fiesta. La marca de licores, Bacardi, este año ha apostado por un Dj español, residente en Brasil, para amenizar las veladas más cálidas del verano mozambiqueño. Djandro, natural de Madrid, y que ya ha llevado sus ritmos tropicales a diversos puntos del mundo: Brasil, Mozambique, Francia o España, entre otros, se muestra sorprendido por la cantidad de sudafricanos que llegan a Mozambique para disfrutar de la noche y la fiesta. Este año ha sido el encargado de poner la banda sonora de la Navidad y el Año Nuevo en la ciudad costera de Tofo, en el sur de Mozambique.
