El accidente de tránsito ocurrido en el norte de Lima el pasado 2 de enero que dejó 52 personas muertas pone en cuestionamiento el sistema vial peruano. Políticos y transportistas denuncian que las carreteas del país generan ganancias millonarias a empresas concesionarias, sin embargo éstas no invierten en seguridad vial. teleSUR