La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha abierto la décima Conferencia Internacional de Banca, celebrada en la ciudad financiera del Grupo, en Boadilla del Monte, y ha centrado su discurso en la transformación digital que está experimentando el mundo y en la necesidad de que las grandes empresas y los grandes bancos se adapten muy rápidamente a los nuevos tiempos y contribuyan decisivamente a una sociedad más justa y a un crecimiento económico más inclusivo en todo el mundo.
La Conferencia Internacional de banca organizada por Banco Santander es uno de los eventos anuales más importantes del mundo financiero internacional, y a él asisten cerca de mil representantes de las principales instituciones públicas y entidades privadas de todo el mundo.
Ana Botín ha reclamado que más personas puedan beneficiarse del crecimiento y del progreso que está generando la transformación digital, y ha destacado que es preciso ayudar mejor a las pequeñas empresas para que sean motores del crecimiento y la creación de empleo, así como a los 2.000 millones de personas en todo el mundo que actualmente no tienen acceso a servicios bancarios.
Para la presidenta del Santander, la transformación digital va a tener mucho más profunda de lo que sospechamos y que las grandes empresas, con sus primeros ejecutivos a la cabeza, son las principales responsables de que se adopten culturas más abiertas y colaborativas.
De acuerdo con Botín, en España, como en Europa, tenemos excelentes capacidades para afrontar esta transformación digital.
En este entorno de transformación a velocidad exponencial, la misión de Banco Santander es contribuir al progreso de las personas y las empresas. La presidenta Botín desarrolló diversos ejemplos empresariales de cómo se traduce esa misión en el apoyo a pequeñas empresas y en España, el Reino Unido o Brasil, con programas como Breakthrough en el Reino Unido, Microcréditos y Superdigital en Brasil, o Santander Advance en España.