Campesinos, indígenas y movimientos sociales se mantienen movilizados en repudio a los hechos violentos ocurridos en el sur de Colombia, en el municipio de Tumaco, donde nueve personas fueron asesinados. Además, los manifestantes exigen al Estado que cumpla con los Acuerdos de La Habana y aseguran que la masacre fue responsabilidad del gobierno ante la negativa de los labriegos de erradicar de forma forzada los cultivos de coca, que son el sustento de las familias. teleSUR