El Ejército de Al Asad asegura que ya tiene el control “total” de las cercanías del aeropuerto militar de la ciudad, que está parcialmente en manos del llamado Estado Islámico desde 2015. Con ayuda de sus aliados- Hizbulá, Irán y Rusia- las tropas regulares consiguieron romper la semana pasada el cerco de los yihadistas, que asediaban la mitad de la urbe en manos del régimen. En la ofensiva, el EI está perdiendo, uno tras tras otro, todos los centros vitales allí.
Deir Al zur tiene valor estratégico, de ahí que hay una carrera contrarreloj por ver quién consigue expulsar antes a los yihadistas, las fuerzas sirias o el combinado kurdoárabe que avanza por el norte. Los civiles que escapan de Deir al Zur lo hacen a las zonas liberadas por las Fuerzas Democráticas de Siria, como esta mujer.
“ Los aviones bombardeaban de manera indiscriminada. Murieron muchas personas, incluidos niños. Muchas casas fueron destruidas. Solo se quedaron los ancianos, porque no podían huir”
El domingo, por primera vez desde 2014, el Programa Mundial de Alimentos pudo entregar ayuda humanitaria por carretera a los habitantes de Deir al Zur.
