Isco Alarcón iluminó con su fútbol el firme camino al Mundial 2018 de España, con una exhibición en el Santiago Bernabéu, donde se plasmó el relevo del testigo de liderazgo de una leyenda como Andrés Iniesta, con un triunfo contundente ante una Italia que buscó la victoria y se fue goleada (3-0).