Han pasado ya 40 años de la muerte de Antonio Machín, una de las voces inconfundibles del siglo XX. Perfidia, Dos gardenias, Angelitos Negros son algunas de las canciones que pertenecen a los recuerdos de millones de personas. Siempre junto a sus maracas, Machín dejó pronto Cuba para viajar a Europa. Aquí se enamoró de una sevillana con la que se casó y que le vinculó mucho a la ciudad de Sevilla. De hecho su hermano también vivía ya en la ciudad y regentaba un negocio.