Complicaciones logísticas están retrasando la retirada de combatientes del frente Al Nusra del Líbano a Siria.
El Ejército libanés ha autorizado a un primer grupo de autobuses a cruzar a la zona de reunión en Arsal y de allí los combatientes y sus familias- unas 9.000 personas- se dirigirán hacia territorio sirio. Es la segunda parte del canje entre esa amalgama de facciones islamistas rebeldes y Hizbulá, que comenzó la semana pasada con el intercambio de cadáveres. En esta nueva fase, los milicianos de Al Nusra podrán regresar a Siria a cambio de que liberen a los prisioneros de Hizbulá en su poder, la guerilla libanesa que combate al lado de Al Asad en la guerra siria.
El 21 de julio el Ejército sirio y Hizbulá lanzaron una ofensiva conjunta contra Al Nusra en las montañas de Arsal, en el lado libanés, y los montes de Al-Qalamun, en la parte siria.