Cada uno llevaba una mochila, iban equipados con botas de montaña con tacos de goma. En una de las mochilas había una botella de la que no quedaban rastros de etiqueta y un libro.
Marcelin y Francine Dumoulin quedaron atrapados en el glaciar Tsanfleuron en el canton de Valais en los Alpes suizos en 1942.
Su hija pequeña, Marceline Udry-Dumoulin, de 79 años, se siente aliviada: “Siento una verdadera paz interior porque siempre he ido hasta el glaciar, este año tenía previsto subir el 15 de agosto para conmemorar los 75 años y han sido mis padres los que han venido a mi. Estoy feliz, no pueden hacerse la idea de cuánto, no soy capaz de explicarlo porque en realidad yo no legué a conocer a mis padres; con cuatro años eres muy pequeño”.
Los siete hijos de la pareja fueron adoptados por diferentes familias. Al parecer iban de excusión al cantón de Berna y cayeron en una grieta hasta que el glaciar retrocedió 75 años después.