El cruel Señor Hackles no perdona ni siquiera una sola deuda a ninguno de sus vecinos. Sin embargo para la Noche de brujas decide hacer un trato en el cual los hijos de los deudores deben ir a la casa de él y encontrar el documento en el cual se encuentra la deuda anotada para que éste les perdone la deuda. Sin embargo, será él quien recibirá una desagradable sorpresa.