El gigantesco animal, que vive en Melbourne (Australia) no tiene problemas en pasar sus días acompañado de perros y llevar una vida “bastante relajada”.
Con un peso de 14 kilogramos y una longitud de 120 centímetros, el gato espera superar el récord que ostenta la británica Maine Coon Ludo, cuya mascota mide 118.3 centímetros.