No se puede describir a una madre que perdió un hijo, sin embargo, la búsqueda de justicia y el amor eterno permiten entender a una mujer que sigue viva después de la muerte.
El caso "Leandro Denegri" fue uno de los homicidios mas emblemáticos del país, el 24 de Junio del año 2003, el joven se sumaba a la trágica lista de jóvenes que perdían la vida, de forma absurda, en ocasión de robo.
"Me prepararon para ser madre, nadie me enseño a vivir sin un hijo", el relato desgarrador le pertenece a una de las madres argentinas que mas lloro, lucho y postergo su vida por la memoria de Leandro; un robo al voleo, cinco asesinos y una familia destruida, la "sensación" de inseguridad golpeaba la puerta de Marisa Denegri, en forma de tragedia.
"Aca nos pusieron una bomba en el medio de la familia, pensaba que no quedaba mas nada, pero habia una vida, una muerte y tenia que aprender a vivir entre el cielo y la tierra", con lagrimas en los ojos y aun sin saber `por que?, Marisa intenta explicar como es vivir después de morir, como es ser madre sin tener un hijo y como escuchar a Leandro sin poder recordar su voz.