Se trata de dos mujeres y cuatro hombres que fueron detenidos en Birmingham, la ciudad en la que vivía el autor del ataque que dejó cinco muertos, incluido el propio terrorista, y 50 heridos.
La policía británica centra ahora su investigación en comprender la motivación del terrorista y descubrir si actuó solo. Para ello ha pedido la colaboración ciudadana.
En Birmingham más de un centenar de personas han participado en un vigilia convocada por una organización contra el racismo y el grupo local Participación y Desarrollo Musulmán.
“Algunos extremistas intentarán aprovecharse de la situación. Extremistas religiosos como el Dáesh que reclaman ataques como este y que quieren proyectar una imagen fuerte de sí mismos, para glorificarse y reclutar a más gente para sus fines malvados o extremistas de derecha que explotan incidentes terribles y trágicos como este para alimentar el odio contra comunidades enteras”, declaraba Salma Yaqoob, activista y exconcejal de Birmingham.
Según ha informado el servicio de salud inglés, 17 heridos siguen hospitalizados y uno de ellos se encuentra en estado de extrema gravedad.
