Miles de personas han pedido durante 13 días la renuncia del Primer Ministro Sorin Grindeanu, así como del presidente Klaus Iohannis. Sin embargo eso sería difícil de lograr, según expertos, pues aunque las convocatorias de manifestaciones de los últimos días han sido multitudinarias aún no tienen la fuerza para provocar cambios de ese tipo en el gobierno. teleSUR