La justicia estadounidense rechaza el recurso de Trump sobre el veto migratorio

2017-02-10 93

Esta es la segunda vez que se rechaza la demanda de Trump para que se levante la medida cautelar contra su decreto.

El texto prohibía la entrada a Estados Unidos a los viajeros procedentes de siete países musulmanes, durante tres meses; a los refugiados, durante cuatro meses y, además, bloqueaba la entrada indefinidamente en el territorio a las personas con pasaporte sirio. La avalancha de protestas no se hizo esperar.

Este jueves el Tribunal de Apelaciones de San Francisco ha rechazado unánimemente el recurso del Gobierno federal contra la suspensión temporal del decreto, dictaminada por un juez de Seattle la semana pasada.

Los tres jueces del Tribunal de Apelaciones: William Canby, Richard Clifton y Michelle Friedman han subrayado, en las 29 páginas de su informe, que el gobierno no ha demostrado que el mantenimiento de la suspensión del decreto se traduciría en graves ataques a la seguridad estadounidense.

En Westwood, un barrio de Los Ángeles que acoge a una importante comunidad iraní, suspiran aliviados. No en vano, Irán es uno de los países afectados por el decreto

Mike Amiri tiene la doble nacionalidad: iraní y estadounidense, para él el fallo del Tribunal implica que “se acabó. Donald Trump, seguramente llamará y dirá: OK, nos veremos en tribunales. Pero yo espero que esto zanjará el problema y que, después, eliminarán el veto a viajar a Estados Unidos, porque nosotros, todos nosotros, somos refugiados”.

Efectivamente, en sus “tweets” Trump no parece darse por vencido, y promete que la batalla continuará en los tribunales, en aras de la seguridad nacional.
SEE YOU IN COURT, THE SECURITY OF OUR NATION IS AT STAKE!— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 9 de febrero de 2017

El pulso legal comenzó en Seattle. El ministro de Justicia del estado de Washington recurrió el decreto ante un juez federal, Bob Ferguson, por considerar que violaba la libertad religiosa, protegida por la Constitución.

El jueves, Ferguson se mostró seguro y desafiante: “el presidente puede elegir entre seguir batallando por esto; o puede romper en mil pedazos su decreto y empezar de nuevo. Yo le urgiría a que considerara esta última opción.”

Para Rory Little, profesor de derecho en la Universidad de California Hasting College of Law, Trump y su equipo están lejos de ganar la batalla. Según él, “si recurren al Tribunal Supremo se arriesgan a un fallo en su contra. Me parece que, estratégicamente, no deberían hacerlo, pero este presidente no se amilana ante nadie.”

Esta es la segunda vez que se rechaza la demanda de Trump para que se levante la medida cautelar contra su decreto. El gobierno tiene 14 días para apelar la decisión. Si el caso llega al Tribunal Supremo y hay empate en el voto de los jueces, se mantendría el fallo del Tribunal de San Francisco.