La ONU evoca una campaña de "limpieza étnica" en Myanmar contra la minoría rohinyá

2017-02-03 536

Asesinatos, torturas, detenciones arbitrarias, violaciones en grupo, expulsión forzosa de sus hogares… Los testimonios sobre las atrocidades perpetradas por el ejército birmano contra la minoría musulmana rohinyá encajan en la definición del delito de “limpieza étnica”. Lo dice un informe elaborado por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados que se ha hecho público este viernes.

Desde que los militares lanzaron una campaña “antiterrorista” en el estado de Rakhine el pasado mes de octubre, más de trescientos rohinyás han muerto a manos del Ejército y unos 80.000 han abandonado sus casas: la mayor parte han huido a Bangladés, sumándose a los más de 232.000 rohinyás que allí se refugiaron en olas de violencia precedentes.

Aunque esta minoría étnica ha vivido durante generaciones en Rakhine, en Myanmar, donde nueve de cada diez personas son budistas, se les considera extranjeros y son objeto de discriminación.

Tampoco son muy apreciados en Bangladés. El gobierno los quiere llevar a una isla desierta en el Golfo de Bengala, sin embargo, los habitantes de localidades vecinas desconfían de su presencia:

- “Tenemos miedo, porque la naturaleza de la gente rohinyá no es buena”, se queja el alcalde de un pueblo cercano. “Han sido traficantes de drogas, contrabandistas. Si vienen aquí, que ya soportamos los robos de piratas, tendremos muchos problemas”.

Malasia ha enviado ayuda humanitaria urgente para socorrer a los rohinyás. Un buque con 22.000 toneladas de medicinas y alimentos navega rumbo a la región, donde se le espera dentro de una semana.