Donald Trump y su hija Ivanka han acudido a una base militar en Delaware para recibir los restos mortales del miembro de las fuerzas especiales fallecido en una misión en Yemen durante el fin de semana.
Es la primera misión que el nuevo mandatario estadounidense autorizaba como parte de la guerra contra Al Qaeda. En la operación también habría muerto la hija de 8 años del clérigo radical estadounidense-yemení Anwar al Awlaki, que cayó en un ataque con drones en 2011.