Tras casi un mes a la deriva por fin pisaron tierra en Australia.
Alan Langdon y su hija Que de 6 años zarparon a bordo de un pequeño catamarán el 17 de diciembre. Salieron de Kawhia en el norte de Nueva Zelanda con dirección a la Bahía de las Islas, ambas zonas situadas en la Isla Norte del país cuando una tormenta dañó uno de los dos timones de la embarcación, dejándola a merced de la corriente durante 27 días hasta llegar a la costa australiana.
“Nos encontramos sin un timón, así que no teníamos muchas opciones. Como dije esperamos a que el tiempo mejorara pero no sucedió y en el punto en el que estábamos empezamos a derivar hacia fuera, al sur. No me imaginaba que navegar con un solo timón iba a ser tan difícil. Fue interesante y exigente”, decía Langdon
Tras cruzar el mar de Tasmania y llegar a Australia, Langdon dijo que en ningún momento corrieron peligro en el pequeño catamarán de poco más de 6 metros ya que siempre contaron con agua y víveres.
“Pasó mucho tiempo en el mar pero nunca la vi en peligro. Nunca estuvimos en peligro”.
La Policía neozelandesa investiga si Langdon, cuya custodia de la hija se disputa con la madre, infrigió una orden judicial al haber sacado a la niña del país sin permiso.