Antes incluso de que Donald Trump llegue a la Casa Blanca, la mayoría republicana del Senado estadounidense ya ha puesto en marcha el proceso para liquidar el “Obamacare”.
Con 51 votos a favor y 48 en contra, el Senado ha aprobado una resolución que da luz verde a varios comités para que preparen la legislación para desmantelar la reforma sanitaria. El objetivo es que a mediados de febrero, poco después de la asunción de Trump, todo esté listo para que el Congreso revoque definitivamente el mayor logro legislativo de los ocho años de mandato de Barack Obama.
El “Obamacare” nació en 2010, con la intencion de proporcionar un seguro médico a todos los estadounidenses. Se calcula que 20 millones de personas se benefician a día de hoy de esta revolución sanitaria. Sin embargo, desde el principio los republicanos han luchado contra la reforma, considerada demasiado costosa. Su desmantelamiento es una de las grandes promesas electorales de Donald Trump, quien también prometió poner rápidamente en marcha un plan alternativo, pero ese, de momento, no existe.
