Estados Unidos sanciona a cinco ciudadanos rusos, entre ellos un estrecho colaborador del presidente de Vladímir Putin.
El castigo es consecuencia de la llamada “ley Magnitsky”, que desde hace 4 años sirve para sancionar las violaciones de derechos humanos cometidas en Rusia. El nombre que destaca en la lista Alexander Bastrykin, cercano a Putin. También figuran los presuntos asesinos del exespía ruso Alexander Litvinenko en Londres en 2006, Andrei Lugovoi y Dimitri Kovtun.