Los militares amotinados desde el jueves mantienen retenido al ministro de Defensa después de haber alcanzado con él un acuerdo que colma sus principales reivindicaciones económicas y laborales.
La conclusión del pacto ha sido confirmada por el presidente del país, Alassane Ouattara, a su regreso de Ghana, a donde había acudido para asistir a la investidura del nuevo jefe del Estado.
Los militares habían bloqueado varias localidades del país, entre ellas Buaké, la más poblada tras la capital.
Ouattara les ha pedido que regresen a sus cuarteles.
Sin embargo, poco después de anunciarse este acuerdo ha estallado un tiroteo precisamente en el edificio en el que habían tenido lugar las negociaciones y en el que aún estaba el ministro de Defensa, al que se ha impedido regresar a Abiyán. Los amotinados exigen al Jefe del Estado que aclare en qué fechas y qué cantidad de dinero se les va a pagar.
Costa de Marfil ha sufrido dos guerra civiles en los últimos 15 años.