El Papa Francisco ha recibido en el Vaticano a varios cientos de afectados por los terremotos que asolaron en 2016 varias localidades del centro de Italia y en los que murieron casi trescientas personas.
Jorge Bergoglio consoló a los supervivientes y les prometió que se desplazaría de nuevo a las zonas devastadas, como ya hizo en visita sorpresa a Amatrice el pasado 4 de octubre.
“Aún siendo afortunado por haber salido vivo de ese infierno, uno nunca puede borrar el dolor por la muerte de tantos amigos, decía este damnificado. Padre Santo te pedimos que nos apoyes con la oración, para reconstruir los corazones antes que las casas.”
La tierra sigue temblando en Italia. Según los medios locales, habría habido más de 30 sacudidas entre Amatrice y Accumoli desde que empezó el año.
“Quiero hacer mía vuestras palabras, pues en vuestra situación lo peor que podría hacer es daros un sermón, dijo el santo pontífice.”
“Hay cicatrices en los corazones y hoy lo que se necesita es esperanza para reconstruir todo lo que esté en nuestras manos.”
Tras la serie de terremotos que sacudieron el centro de Italia en agosto, octubre y noviembre de 2016, unos 28.000 damnificados se quedaron sin casa teniendo que ser alojados en hoteles y en construcciones prefabricadas. Más de 11.000 personas siguen en esta situación según la protección civil italiana.
