La ciudad de Alepo no entiende de fines de semana. En las últimas horas al menos 27 personas han muerto como consecuencia de los bombardeos al este de la ciudad siria. Así lo asegura el Observatorio Sirio de Derechos humanos.
Una zona en la que, además, solo queda ya un hospital operativo tras el cierre, este viernes, de cuatro centros sanitarios afectados por los bombardeos.
“Tenemos testimonios creíbles y bien documentados que señalan que los hospitales son bombardeados. Y son hospitales, con pacientes. Gente que está tratando de recuperarse y que está siendo bombardeada. Y francamente no importa en absoluto qué aviones están lanzando las bombas, ya sean sirios, rusos o de ambos países. El hecho es que hay que detenerlos”, señala John Kirby, portavoz del Departamento de Estado estadounidense.
Consecuencia de esos ataques serían estas imágenes, difundidas en las redes sociales y que muestran el rescate de dos menores entre los escombros de varios edificios. El pasado día 15, se reanudaron los ataques contra la mitad oriental de Alepo, sitiada por el ejército y controlada por la oposición, aunque tanto Rusia como las autoridades sirias niegan su implicación.
