Unas 3.000 personas de varios paíes europeos se han manifestado en Bruselas contra los recientes arrestos promovidos por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, tras el golpe de Estado de julio. Una protesta, sin embargo, sin la presencia de la principal fuerza de la oposición turca, el Partido Republicano del Pueblo (CHP).
“El Ejército garantizaba la laicidad en Turquía. Primero ha detruido el Ejército y después la justicia. Ahora está solo él y no sabemos qué más quiere porque ya tiene todo el poder”, dice este hombre.
Ha habido algunos momentos de tensión pero en general la manifestación se ha desarrollado de manera tranquila. Turquía es un país clave para Europa, sobre todo de cara a la gestión de la crisis migratoria.
“La Unión Europea ha apoyado al Gobierno turco, a Erdogan y por eso estamos aquí. Nos gustaria pedir a los países europeos que rompan sus lazos con el Gobierno turco y que se apliquen sanciones”, reponde este otro participante.
El sábado que viene hay convocada otra gran manifestación en la capital belga, esta vez a favor del Gobierno turco.
